EL MEDIO AMBIENTE DESDE LA ESCULTURA
MADRE SELVA
Ternura y fuerza sostienen su imagen, asaltan su figura, bejucos que se enredan en su cuerpo. Desde adentro, como si estuviera pariendo, desde sus entrañas mágicas brota su fruto simbólico. Sobre la tierra afirma su existencia, sus momentos, el hombre que la habita y sueña.
Te labré sin desmoronarte madre selva,
como la selva Virgen, eres tierna,
tus manos, como aves, tu silencio.
En tu vientre, en tu eternidad dormida,
simbolizas mi destino, sombra eres, caudal profundo.
En ti duermen los instantes, los segundos son de fuego,
por tu frescura caminas como existiendo siempre,
tus caídas hojas duermen en el silencio,
chasquean bajo mis pies tus entrañas como escamas.
A ti siempre fecunda, estoy bajo tu sombra,
me envuelves y me devoras largamente,
te posaste sobre la tierra, con tus raíces la sostienes como de los cabellos,
tus brazos nos cobijan, eres mi vivienda.
Dejas que te habite y me habitas.
